Entre la piel y el placer… textos de poder

Diana Catherine Chacón
Conferencia
23 Nov
2 : 00 PM

La presente ponencia se construye en tormo a la afirmación de que la sexualidad es un producto cultural, social e histórico que se hace efectivo en el cuerpo a través de la vivencia de la sexualidad, lo que permite la construcción, deconstrucción y reconstrucción de la cotidianidad personal y colectiva de los individuos. En este sentido, reconoce que lo “íntimo también es político” dejando ver que la relación que se da entre los sexos es una relación política atravesada por relaciones de poder. Hacer político lo personal, lo íntimo, pasa por el reconocimiento de las iniquidades y agresiones que pueden llegar a vivir las mujeres, solo por el hecho de serlo y que se simbolizan en sus cuerpos sin importar raza, género, clase, etnia u otra condición que lo identifique.

Lo permitido y lo no permitido se convierte en el eje ideológico sobre el cual se experimenta el poder en la sexualidad, que en algunos casos favorece a los hombres y afecta abruptamente a las mujeres. Por ello, el interés de esta ponencia (la cual fue presentada como propuesta de investigación para cursar estudios de maestría en Antropología), se centra en caracterizar las múltiples violencias que se ejercen en torno al cuerpo femenino en el ejercicio de sus prácticas y hábitos sexuales, siendo posible cuestionarme ¿Cómo se tejen las relaciones de poder en torno al cuerpo femenino a través de las prácticas y hábitos sexuales?

El cuerpo y la sexualidad femenina como tema de discusión para el seminario, toma relevancia, porque expone una discusión que permite levantar un inventario y comprensión de las lógicas sociales y culturales que se articulan a las relaciones cotidianas de los individuos, especialmente las mujeres, en el plano del ejercicio de su sexualidad (concretamente lo concerniente a su prácticas y hábitos sexuales) y cómo de esta manera, esa vivencia se relaciona con ejercicios de poder y violencias que en algunos casos, son determinados por aspectos interseccionados como la etnia, la clase, el género, la orientación sexual, dada entre otras cosas, por estructuras patriarcales. Estas afirmaciones adquieren mucho sentido para la discusión, toda vez que las mujeres son violentadas desde lo más íntimo, su cuerpo y con él, en el ejercicio de su placer.

A partir de los aportes que ofrece el trabajo documental basado en la revisión de estados del arte, basados en la cultura en general y, la antropología de género o feminista en particular, se entiende que el individuo es un ser encarnado, corpóreo y, que por tanto, su cuerpo, su sexualidad, su desnudez, sus prácticas de relacionamiento, su personalidad e identidad, sus movimientos, etc. deben ser materia de estudio y análisis a la hora de entender los símbolos y significados de los roles que están inmersos en la manera en que se asumen individuos, siendo por lo tanto, un tema de estudio respecto a la comprensión de las dinámicas culturales y personales dentro de contextos sociales particulares.